No es una sorpresa que la crisis del coronavirus está afectando a la sociedad a todos los niveles más allá del personal. No obstante, no podemos obviar el impacto que esta crisis sanitaria está suponiendo para las empresas a nivel interno, afectando a las relaciones con sus clientes y proveedores, a las pólizas de seguros contratadas y, en definitiva, en el ámbito procesal, contractual, laboral e incluso penal.
Por ello, es importante que las empresas aborden estos problemas bajo una perspectiva legal multidisciplinar y siempre desde la prevención.
El desconocimiento y la incertidumbre se han implantado en nuestro día a día y, más allá del origen, éste está afectando a las relaciones que mantienen las empresas con sus agentes económicos, con sus plantillas, a los órganos de administración por tema de responsabilidad, entre otras.
Por ello, es importante que, además de las medidas genéricas que se están recomendando a nivel global, las empresas analicen sus estructuras internas y tomen medidas desde la óptica legal y económica, analizando las consecuencias que cada una de las medidas a adoptar pueden suponer tanto a nivel interno respecto de sus obligaciones contractuales, como a nivel externo de cara a las relaciones futuras con terceros.
A modo de ejemplo, y siempre teniendo en cuenta que será necesario un análisis exhaustivo por parte de profesionales en cada caso concreto, se plantean las siguientes medidas:
- Revisar las pólizas de seguros contratadas por la empresa a los efectos de analizar el alcance de las coberturas y de los procedimientos a seguir para comunicar posibles daños potenciales o incluso medir el impacto que puedan tener las decisiones adoptadas por la propia empresa.
- Comprobar los contratos suscritos con clientes y proveedores, sobre todo en lo que respecta a las causas de fuerza mayor previstas y los riesgos y potenciales indemnizaciones.
- Las medidas a nivel regulatorio que la empresa está obligada a adoptar en relación con la normativa sanitaria y los deberes de información por parte del órgano de administración.
- Prever un posible escenario de litigiosidad provocado por reclamaciones judiciales o extrajudiciales.
En definitiva, ante un escenario tan especial como en el que nos encontramos, será necesario abordar los diferentes problemas que se planteen en nuestra empresa desde un punto de vista legal multidisciplinar y analizando cada situación de manera individualizada.
Ante cualquier duda, póngase en contacto con nosotros. Nuestros abogados y economistas le asesorarán de manera única y personal.